lunes, 17 de diciembre de 2012

Nociones generales sobre Bola de sebo


U. A. A. - C. A. y C. - L. L. H. - T. y A. de T. IV
Carlos Aguilar Esparza

Introducción
Bola de sebo (o Boule de suif) es un cuento publicado en 1880 dentro de Las veladas de Medán, libro en el cual se incluyen textos de Émile Zola, Paul Alexis, Léon Hennique, Henri Céard, J. Karl Huysmans y Guy de Maupassant, este último es el autor del relato mencionado. En términos generales, la trama se reduce al gélido viaje de diez personas francesas en una diligencia y la retención de estos por parte de un soldado prusiano justo después de una batalla entre Francia y Prusia (en la que resultan vencedores los prusianos).



Manejo del tiempo
En Bola de sebo, a diferencia de muchos otros cuentos, no aparecen digresiones. No hay analepsis ni prolepsis, la historia es totalmente lineal.
Desde que comienza el texto, el narrador -totalmente omnisciente- sigue cronológicamente la secuencia de los hechos. Cosa curiosa, a pesar de que la acción comienza a partir de que los personajes se reúnen en el patio de la Posada Normanda, el narrador da un amplio prefacio que llega a los veintiún párrafos en donde explica la situación general en Rúan, esto ayuda al lector a crearse el ambiente que existe en el mundo del texto, así como las preocupaciones y los temores de los personajes. En este prefacio no hay digresión alguna, los únicos saltos temporales son los naturales conforme al avance lógico del tiempo: En la tarde del día que siguió... Al cabo de algunos días...
Hay en el texto un párrafo que da la sensación de analepsis:
Días antes, las heladas habían endurecido ya la tierra, y el lunes, a eso de las tres, densos nubarrones empujados por un viento norte descargaron una tremenda nevada que duró toda la tarde y toda la noche.
No obstante, este segmento es continuo al flujo natural del tiempo en la narración puesto que el evento principal de la última oración (que es la que causa a primera vista, junto con las palabras días antes, la sensación de digresión) es "fijar la salida para un martes", no "fijar la salida un martes":
Así, pues, se había prevenido una espaciosa diligencia de cuatro caballos para diez personas, previamente inscritas en el establecimiento de un alquilador de coches; y se fijó la salida para un martes, muy temprano, con objeto de evitar la curiosidad y aglomeración de transeúntes.
Entonces, a pesar de que el párrafo comience con Días antes, formalmente no es una digresión.
A partir de aquí, la temporalidad sigue naturalmente, si acaso hace pausas descriptivas (Alta, robusta, decidida, con mucha entereza en la voz y seguridad en sus juicios, su mujer era el orden, el cálculo aritmético de los negocios de la casa, mientras que Loiseau atraía con su actividad bulliciosa. Por ejemplo.), resúmenes (Pronto la conversación se rehizo entre las tres damas, cuya recíproca simpatía se aumentaba por instantes con la presencia de la moza, convirtiéndose casi en intimidad.) e incluso elipsis (Todos quisieron averiguar lo sucedido; pero ella no respondía alas preguntas y se limitaba a repetir: / —Es un asunto mío, sólo mío, y a nadie le importa.). Estas últimas son de suma importancia, pues mientras las pausas y los resúmenes le dan matices y ritmo respectivamente a la narración, las elipsis enriquecen la trama, pues contienen información deliberadamente evitada por el narrador (como lo son las dos "entrevistas" entre Isabel Rousset y el oficial prusiano).

Los personajes
Básicamente son trece los personajes, no obstante, ni el mayoral, ni el oficial prusiano son muy tomados en cuenta por el narrador (aunque las acciones de uno y otro son relevantes en cierta medida para el texto, especialmente las del oficial). Las dos monjas son muy poco importantes en cuanto acciones, sin embargo, el narrador repara más en ellas (más adelante se habla del efecto que tienen en el texto), incluso las describe, lo mismo pasa con el posadero Follenvie.
Los personajes en los que más repara el narrador son el conde y la condesa Hurbert de Breville, el señor Carré-Lamadon y su esposa, el señor y la señora Loiseau, el ebrio demócrata Cornudet y por supuesto, Bola de sebo (quien después nos enteramos se llama Isabel Rousset). Bola de sebo es el personaje principal, pues a través de ella el lector experimenta una cierta especie de sufrimiento.
Mientras que el oficial prusiano, el mayoral, la monja más joven y Follenvie son personajes lineales (pues no cambian sus paradigmas a lo largo de la historia), todos los demás personajes sufren algún cambio, al menos momentáneo. En el caso de los Carré-Lamadon, los Humbert y los Loiseau, este cambio es su forma de relacionarse con Bola de sebo, al principio de la historia la tratan como a un ser repugnante, más adelante, en las distintas necesidades, la tratan como alguien a quien aprecian e incluso necesitan aunque finalmente la vuelven a tratar como a escoria. El caso de la monja anciana es un cambio menor, de ella aparecen varias facetas, la primera como una simple monja, después como una valiente enfermera de guerra, luego, al probar la champaña, como un ser que puede disfrutar y finalmente como un personaje mezquino.
Bola de sebo, a pesar de ser protagonista de la historia, tiene más bien pocos cambios pues sus convicciones son fuertes. Es una prostituta, pero exige un trato digno, es precavida, considerada y patriota. Sobre todo patriota.Es ese el punto de inflexión, pues la peripecia principal que sufre este personaje es, justamente, traicionar su patriotismo. Aunque la peripecia principal sea decidirse a estar o no con el prusiano, el conflicto principal de Bola de sebo no es otro que el trato desagradecido de sus compañeros de viaje después de sacrificarse por ellos.

Funciones, semillas y otros desencadenadores
Al comienzo de Bola de sebo hay una descripción general de la situación en Rúan después de la derrota a manos de los prusianos, toda esta funciona como contexto, pues pone al lector al tanto del mundo que rodea a los personajes y del cambio que ocurre en el mismo.
Poco después hay una referencia por parte del narrador a la moral de los personajes:
Apenas se distinguían en la oscuridad, y la superposición de pesados abrigos daba el aspecto, a todas aquellas personas, de sacerdotes barrigudos, vestidos con sus largas sotanas.
Más adelante, aparecen dos menciones del rosario, la primera ...dos monjas, que sin cesar hacían correr entre sus dedos las cuentas de los rosarios... y la segunda ...con las manos abotagadas y los dedos estrangulados en las falanges —como rosarios de salchichas gordas y enanas—. La primera se refiere a las monjas y la segunda a Bola de sebo, en esta ocasión, parece ser que también se refiere a las características morales de los personajes, no obstante, se refiere solamente al estatus que tienen los personajes en la sociedad, por lo que se entiende que las monjas se encuentran en un peldaño social más elevado que Bola de sebo (aunque más adelante nos damos cuenta de que no a nivel moral). Si bien las monjas no representan un elemento importante en la trama, sirven para marcar contraste entre lo puro y lo impuro, remarcando dos polos entre los que Bola de sebo representa el negativo y ellas el positivo.
Si bien la parte en que Bola de Sebo se inclinó varias veces como si buscase alguna cosa debajo de sus faldas no es meramente la semilla de algún evento, es un indicio que nos revela la personalidad solidaria y además precavida de la prostituta.
Durante el viaje de Rúan hacia Totes, es Bola de sebo quien lleva la comida (¡y la comparte!). Esta escena juega un papel interesante, ya que funciona como una secuencia irónica, pues cuando Bola de sebo no tiene tiempo de preparar provisiones nadie la ayuda, es más, la tratan como a basura aún siendo por su sacrificio que continúa el viaje de Totes a Havre.

Conclusiones
Bola de sebo es un relato que se apega a la estructura narrativa tradicional, es decir, la narración es lineal, sin digresiones. También se apega al narrador omnisciente (que si bien en ocasiones nos oculta detalles como el nombre de Bola de sebo, lo hace para dar énfasis en otros aspectos o momentos del relato) en tercera persona.
El tema principal es la diferencia entre nivel social y nivel moral, ya que al principio del cuento, parece ser que el nivel moral es equivalente al nivel social, pero después se descubre que no es así, que es posible que una persona -o personaje- de un nivel social inferior puede tener mayor nivel moral que alguien en un estrato superior.

domingo, 2 de diciembre de 2012

ANÁLISIS SOBRE LA MUERTE EN VENECIA DE THOMAS MANN


U. A. A. - C. A. y C. - L. L. H. - L. M. C.
Carlos de Jesús Aguilar Esparza


INTRODUCCIÓN
La muerte en Venecia es publicada en 1912, apenas dos años antes de que comenzara la Gran Guerra. Europa era gobernada por un sentimiento de amenaza política. El Imperio Alemán tenía ya una posición peligrosa para Gran Bretaña y Francia. La casa de Austria perdía su condición de potencia.

SOBRE THOMAS MANN1
Nació el 6 de junio de 1875 en Lübeck. Después de morir su padre, Mann y su familia se trasladaron a Munich en donde él trabajó como redactor de Simplicissimus, una revista de carácter satírico en la cual fueron publicados sus primeros relatos breves. Allí recibia visitas de Herman Hesse y Gustav Mahler entre otros grandes de la época.
Es autor de Los Buddenbrook, La montaña mágica, Tonio Krögre, Desorden y dolor precoz, Mario y el mago, José y sus hermanos, El elegido, Confesiones del estafador Félix Krull y el ensayo Consideraciones de un apolítico. En 1929 le es otorgado el Premio Nobel de literatura “especialmente por su magna novela Los Buddenbrook, que ha venido ganando creciente fama como una de las obras clásicas de la literatura contemporánea.”. En la introducción de Thomas Mann: Premio Nobel 1929 se menciona que a causa de los conflictos en Europa, los eruditos de Estocolmo preferían otorgar el premio a franceses, ya que hasta 1913, cuatro de los catorce nombramientos entregados eran para alemanes y sólo dos franceses, por lo que a Mann le fue entregado el premio después de que tres franceses más lo obtuvieran.2
En 1933, el régimen democrático y la militancia nacional-socialista hitleriana lo obligan a exiliase a Suiza y en 1938 a Estados Unidos.


ASPECTOS DE LA MUERTE EN VENECIA
Es una novela corta en donde se muestra el aliento decadente de Europa, su ambiente tóxico. Dos años después de la publicación de la obra, en 1914, ocurre el asesinato de Francisco Fernando, el archiduque Austro-húngaro, hecho con el que comienza la Gran guerra que -si bien no hay señas de ella en la novela- se puede sentir en La muerte....
El personaje principal de la obra es Gustavo Von Aschebach un escritor de más de cincuenta años, quien se sabe decadente físicamente. Es un personaje pasivo que no se deja vencer por las situaciones sino que resiste sin luchar, a partir de esto, es que su grandeza se realiza.
Pero su lema favorito fue siempre resistir, y su epopeya de Federico no era sino la exaltación de esta palabra, que le parecía el compendio de toda virtud pasiva.”

Otro personaje es Tadrio, un muchacho de cabellos largos que parecía tener sólo unos catorce, polaco y la representación de la belleza para Aschenbach.
Estos personajes son presentados por un narrador que es omnisciente con respecto a Aschenbach y testigo para con Tadrio, a quien sólo muestra bajo la mirada del personaje principal.
El tiempo en la novela pasa relativamente veloz, pues hay pocas acciones y más flujo de ideas. En cuanto al espacio, este tiene una gran amplitud; al comienzo de la obra el personaje recorre la calle Príncipe Regente -en Munich-, cruza un parque -el Englisher Garten-, llega a un cementerio y regresa a su casa por la calle Ungerer (o Angerer, aparece de ambas maneras); en la segunda sección no hay espacio, esta es más bien la descripción de la obre de Aschenbach y un recuento de su vida, en un hombre viudo con sólo una hija ya casada, autor de renombre, escritor de Maía y de la epopeya Federico II (la cual puede hacer referencia a Federico II Hohestaufen, emperador del Sacro Imperio Romano Germánico o a Federico II el Grande, rey de Prusia). En la parte III, Aschenbach viaja a una isla del Adriático y después de decepcionarse del lugar parte a Venecia donde el escritor se hospeda en el Hotel Bader -en donde mira a Tadrio-. En la cuarta parte el espacio se reduce al hotel y la playa mientras que en la quinta sección crece nuevamente, el personaje principal pasea por Venecia, entra a establecimientos, va a la plaza, y finalmente muere en la playa.
Este final nos viene advertido durante toda la lectura, al comienzo de la historia -cuando Aschenbach se encuentra fuera del cementerio- el narrador indica que el cementerio está también en la calle: Detrás de las verjas de los marmolistas, ante las cuales las cruces, lápidas y monumentos expuestos ala venta formaban un segundo cementerio, no se movía nada. Más adelante nos dice como es que el personaje se condena saliendo de Munich: Su vida exterior se había limitado casi exclusivamente a deslizarse dentro de la hermosa ciudad en que fijara su residencia y a escapar de vez en cuando hacia la recia casa de campo... entonces, al salir de su ciudad -y no dirigirse hacia su casa de campo- excede los límites autoimpuestos a su propia vida. Otra señal es la góndola que lo lleva hasta el Lido, la que tiene una enorme semejanza con Caronte y su viaje por el Aqueronte -con la diferencia de que Aschenbach no le paga y para esto no vagó cien años por la rivera-; el narrador describe la góndola como negra,con una negrura que sólo poseen, entre las demás cosas, los ataúdes...
El conflicto no es la muerte, como podría suponerse por el título y la enorme presencia que tiene a lo largo de la novela, sino la búsqueda de aceptación que hace el viejo escritor para con Tadrio, búsqueda que al principio -antes de ver a Tadrio por primera vez- le parecía que todo eso se salía de lo normal, sin embargo, él mismo realiza lo que antes había condenado.

CONCLUSIÓN
La muerte en Venecia, novela escrita por el alemán Thomas Mann y publicada en 1912, refleja el ambiente decadente de la Europa de comienzos del siglo XX, justo antes de la Gran guerra. Narra la historia del último viaje de Gustavo Von Aschenbach y el enamoramiento que sufre por Tadrio, un joven polaco a quien mira en Venecia. En la obra no es tan importante la secuencia de acciones, sino el flujo de ideas, lo que hace que el narrador se omnisciente pero únicamente para con Aschenbach, puesto que desconoce los pensamientos de otros personajes ante los que se presenta como narrador testigo.

BIBLIOGRAFÍA

HOBSBAWM, Eric. (2003) La era del imperio, 1875-1914. Crítica: España.
MANN, Thomas. (2006) La muerte en Venecia (Introducción de Sergio Pitol y Prólogo de Efrén Ortiz Domínguez). Universida Veracruzana: México.
MANN, Thomas. (?) Thomas Mann, Premio Nobel 1929. ????
1 Véase prólogo de Efrén Ortiz Domínguez.
2 Thomas Mann: Premio Nobel 1929, a pesar de tratarse de literatura de tan alta calidad, no tiene los datos suficientes para armar una ficha bibliográfica.